Inspirado en modelos anglosajones y del norte de Europa, durante la última década ha surgido en España un nuevo modelo de atención sanitaria a la muerte perinatal. Este nuevo enfoque reconoce que la asistencia sanitaria juega un papel fundamental en la vivencia del duelo, y puede tener tanto un efecto protector, cuando es de buena calidad, como perjudicial, cuando no cumple con las buenas prácticas.