La muerte por suicidio de su hijo Miquel, de 19 años, transformó la vida de Cecilia Borrás, que entonces ejercía de psicóloga.
En 2012, fundó la primera asociación española que acoge a las familias que entran en el túnel doloroso que ella y su marido empezaron a transitar cuando en 2009 Miquel cortó el dolor de una discusión con su pareja poniendo fin a su vida.
Más información en El Periódico de Catalunya